El coche de novios

¿Habéis pensado en llegar de alguna manera especial el día de vuestra boda?

La gran mayoría de las parejas se lo plantean, y es que, si la llegada del novio con la madrina es ya de por sí muy especial, el momento de la llegada de la novia acaparará la atención de todos cuantos asistan al enlace, será el centro de todas las miradas y flashes, así como también lo será la llegada ambos convertidos en marido y mujer al lugar de celebración. Es por esto que muchas parejas se deciden por llevar un coche de novios que se distinga del resto.

La llegada del novio:

El novio suele llegar acompañado de la madrina, pero es cierto que deben estar presentes un buen rato antes de la ceremonia para recibir y saludar a los invitados, por lo que llegarán antes que la mayoría de ellos y, por tanto, quizás el coche donde se desplazan puede pasar algo más desapercibido en este momento. Aún así, suele elegirse un vehículo elegante y de color oscuro, que puede decorarse también, pero siempre de forma más discreta: están permitidos lazos en las cuatro puertas, o bien pequeños ramilletes. Pero no llevará centro de flores.

La llegada de la novia:

La novia es la última en llegar a la ceremonia, por lo que la totalidad de los invitados que asistan al enlace deben encontrarse presentes en ese momento. Es por esto que el coche elegido para ello suele ser más llamativo, e irá más adornado, con centro de flores, normalmente a juego con el ramo de novia, y ramilletes y lazos en las cuatro puertas, por lo que, además, es el que suelen utilizar ambos para llegar al lugar de celebración una vez convertidos en marido y mujer.

Formas originales para desplazarnos:

Si nos salimos un poco de los coches tradicionales, podemos encontrarnos que también hay vehículos bastantes originales, que irán con la personalidad de los más arriesgados: así tenemos descapotables, limusinas, vehículos antiguos, incluso los hay que se desplazan en moto, válido para novios moteros pero nunca para novias, o hasta en furgonetas de los años 60... Es sólo cuestión de gustos.

También otra de las formas que suelen verse por aquí en el sur es que la novia llegue a la ceremonia en coche de caballos.

Cómo encontrar nuestro coche de novios:

Si finalmente nos decidimos por el coche, y contamos con un coche grande y elegante en la familia, es típico que alguien se ofrezca a llevarnos ese día. Pero ¿habéis pensado que el encargado de llevar a la novia puede perderse parte del enlace?

Por ello, cada vez viene siendo más habitual que las parejas decidan alquilar un coche especial para el día de su boda, y ya hay muchas empresas dedicadas a este fin, con coches para todos los gustos y estilos, y para distintos bolsillos. Suelen ofrecer, además, servicio de chófer, para que nadie se pierda un minuto de vuestro día. En nuestro caso, nos decidimos por esta opción.

Coches con clase

Iniciamos la búsqueda de empresas de alquiler de coches en Sevilla, y tras mirar un par de ellas nos decidimos por Coches con Clase. Encontramos su web por internet, y nos llamó la atención la gran variedad de vehículos que tenían disponibles. Pedimos presupuesto de varios de ellos, pero casi desde el principio tenía claro en qué coche llegaría al altar:

Se trataba de un coche de alta gama, un Chrysler C-300 color negro, que resultó ser más espectacular, si cabe, en directo. Era bastante amplio y cómodo por dentro, con tapicería en piel clara. Era el coche ideal para una novia, grande y elegante, y para hacer la entrada como marido y mujer; además no estaba  tan visto como otros.

Nos pusimos en contacto con la empresa, y Miguel nos atendió de maravilla. Incluso una tarde nos trajo el coche a la puerta de casa para que lo viésemos en persona. Allí también estaba mi padre, el padrino, fueron él y mi madre quienes finalmente nos regalaron el disfrute del coche en el día de nuestra boda. 

Además nos decidimos por contratar adicionalmente el servicio de chófer, porque nuestra iglesia está situada en un sitio bastante céntrico y difícil de acceder y aparcar, y no queríamos que ningún hermano o familiar se perdiese ni un instante de nuestra entrada. También cerramos la recogida de la Hacienda al finalizar la celebración y desplazamiento al hotel. Y desde luego ambas decisiones fueron un acierto.

Cuando Miguel nos trajo el coche y nos montamos para probarlo, sabíamos que era el que queríamos, y ya sólo quedaba cerrar el contrato. Nos trajo toda la documentación y nos explicó como iría todo: Ese día, el coche estaría en casa de la novia una hora antes de la ceremonia, para que no hubiese prisas de ningún tipo. Y a la hora exacta, allí estaba. Raúl nos esperaría a la salida de la ceremonia, para llevarnos hasta el lugar donde tomaríamos las fotos de exteriores, y después nos llevaría hasta la Hacienda. Finalmente, cuando todo acabase, nos volvería a recoger para dejarnos en nuestro hotel. 

Nos incluyeron los centros de flores y lazos de las puertas, a elección nuestra, que es todo un regalo, y más en los tiempos que corren. Esperaron a que tuviese decidido mi ramo de novia para ponerlo todo acorde y a nuestro gusto.

Además, en todo momento pudimos estar en contacto con Pilar, vía email o por teléfono, para resolver cualquier duda que pudiese surgir.

Quería con el post de hoy contaros nuestra experiencia con ellos, porque todo salió a la perfección, siempre puntuales y atentos. Y en un día tan importante, nada puede dejarse al azar, por eso nosotros decidimos trabajar con profesionales. Desde aquí agradecer su trabajo tanto a Miguel como a Pilar, y por supuesto a Raúl, que se portó genial con nosotros, y fue el encargado de que novia y padrino llegasen puntual  a su gran día.


www.cochesconclase.com 

Documentación para una boda religiosa

Seguro que muchos, cuando se va acercando la fecha, empezáis a preguntaros qué documentación necesitáis presentar para poder casaros, qué plazos tenéis para hacerlo, y por qué no suelen aclarárnoslo hasta que se nos echa el tiempo encima. Esto es algo que nos pasa a todos.

Para que no os ocurra a vosotros, os traigo un listado de la documentación necesaria para presentar si vuestra boda es religiosa, en qué consiste cada documento y qué plazos tendréis para obtener cada uno. 

Dependiendo de donde os caséis, puede que os pidan llevar algo más, pero lo realmente necesario es lo que aquí se recoge.

Todos estos documentos pasarán a formar parte de vuestro Expediente Matrimonial, expediente que abrirán en la Iglesia donde vayáis a contraer matrimonio.

Serán necesarios los siguientes documentos:  

Fotocopia del DNI de ambos novios. 
 
Partida literal de nacimiento:

• Es una copia literal de la inscripción de nacimiento, conteniendo todos los datos relativos a la identidad y al hecho del nacimiento. 

• Puede solicitarse de forma presencial, por correos o por internet, con o sin certificado digital, en la  web del Ministerio de Justicia. 

• Para la solicitud necesitaréis tener por delante el Libro de Familia de vuestros padres, porque os pedirán, entre otros datos, la página y el tomo del asiento.

•  Los plazos de entrega variarán según se soliciten por uno u otro medio. Pero contad mínimo 10-15 días.

Partida de bautismo de ambos novios. 

• Cada uno de vosotros tendrá que solicitarla en la Parroquia donde os bautizaron, en el caso que sea distinta de donde se realice el expediente matrimonial.

• El coste dependerá de cada Parroquia. 

• Aunque la suelen tener en el momento, pueden tardar también unos días en entregárosla, sobre todo en el caso que haya que legalizarla.

• La partida de bautismo habrá que legalizarla si fuiste bautizado en una Parroquia perteneciente a una Diócesis distinta de donde vayáis a contraer matrimonio. Normalmente esto se da cuando os casáis en una provincia distinta a la provincia donde os caséis, pero preguntad siempre en caso de duda. Para legalizar la partida de bautismo habrá que llevarla al Obispado al que pertenece la Parroquia donde os bautizaron. Normalmente, lo hace la misma Parroquia, pero si es vuestro caso debéis preguntarlo.

• Tiene una caducidad de entre 3 y 6 meses, dependiendo del sitio. Podéis preguntarlo en vuestra Parroquia, o bien no pedirla antes de que queden tres meses para la boda, para aseguraros.

Certificado de Soltería Eclesiástico o Fe de Soltería: 

• Puedes solicitarlo en la Parroquia de tu residencia habitual.
• El coste también depende del lugar.

Certificado de Cursillo Prematrimonial:

• Sólo si lo realizáis en una Parroquia diferente de donde contraigáis matrimonio. Si hacéis los cursillos en la misma Parroquia no será necesario que os den el certificado, pues directamente lo archivan ellos en el expediente matrimonial.

• De los Cursillos Prematrimoniales  hablaremos  de forma más extensa en otro post, pero adelantar que podéis realizarlo en cualquier Parroquia, sin necesidad de que sea en aquella donde contraigáis matrimonio. 

• Se organizan durante todo el año, y podéis realizarlo con bastantes meses de antelación.

Autorización de la Parroquia a la que pertenezcáis:

• Por defecto, os correspondería casaros en la Parroquia de vuestra residencia habitual, es decir, de donde estéis empadronados. 

• Pero, lógicamente, sois libres de contraer matrimonio en la Parroquia que queráis. Para contraer matrimonio en otra Parroquia, y para que ésta pueda tramitar vuestro expediente matrimonial, normalmente os piden una autorización de aquella a la que pertenezcáis, o pertenezca alguno de los novios.

Toma de dichos:

• Para la toma de dichos debéis llevar dos testigos, que cumplirán los siguientes requisitos:

1. Ser mayores de edad.
2. No ser familiar de ninguno de los contrayentes, pero sí amigos o personas que los conozcan bien.

• A los testigos se les pedirá su testimonio para confirmar que los novios contraerán matrimonio de forma libre, que ninguno está casado ni tiene impedimento para contraer matrimonio, entre otras cuestiones.

• No tienen por qué ser los mismos testigos que firmen el día de vuestra boda.

Amonestaciones:

• Se suelen realizar unos dos meses antes de la boda, ya que deben estar expuestas tres fines de semana anteriores a la boda para poder concluir el expediente.

• Cada contrayente debe llevar las amonestaciones a la Parroquia donde tenga su residencia habitual. En caso de ser la misma para los dos, sólo se expondrá una copia.

• Pasadas tres semanas (tres domingos), la Parroquia donde han estado expuestas os las firmarán confirmando que "nadie se opone a la celebración del matrimonio", y os la entregarán en caso de que os caséis en una Parroquia diferente.

Con las amonestaciones firmadas, y el resto de documentación debidamente cumplimentada, se concluye el expediente matrimonial.

Tras la boda:

Tendréis que inscribiros como matrimonio en el Registro Civil, presentando el acta de matrimonio que os entregarán en la Iglesia, tras las firmas, el día de vuestra boda. 

Es conveniente que se haga cuanto antes el trámite con el Registro, y dependiendo del lugar os dan un breve plazo para hacerlo.

En caso de que os vayáis inmediatamente de viaje de novios, consultad si podéis hacerlo a la vuelta o autorizar a alguien para que lo haga en vuestro lugar.

Espero que os sirva de ayuda, y os haga más llevadero el temido "papeleo".



 

Tutorial cestas para el arroz

Hoy os traigo un tutorial sobre cómo hacer vuestras propias cestas  para el arroz, con un toque más personal, y por mucho menos que si las compramos preparadas.

El material que vamos a utilizar es:

• Hilo.
• Aguja.
• Yute o rafia, en los colores que queráis; lo podéis encontrar en mercerías.
• Una cesta de mimbre no demasiado grande. Yo la compré en blanca.
• Tul de colores para los sacos de arroz (los metros dependerán de los paquetitos que queráis preparar, estará bien unos 40-60)
• Lazo fino.
• Arroz

Para los saquitos de arroz:

1. Cortamos el tul en cuadrados, aproximadamente de unos 15 cm de lado.
2. Cogemos un par de puñados de arroz y lo agrupamos en el centro del cuadrado. Es aconsejable limpiar bien el arroz antes de almidón.
3. Unimos las esquinas y anudamos con un trozo de lazo no muy grande (lo que sobre podemos recortarlo).

Yo los hice en dos colores, de tul blanco con el lazo en morado, y de tul morado con el lazo blanco.

 

Para la cesta:

Vamos a forrar el asa de la cesta de mimbre con yute, y acabará en ambos extremos con dos lazos que confeccionaremos aparte:

Lazos: Cogemos un trozo de yute, aproximadamente de unos 30 cm, unimos los extremos y cosemos.

Una vez cosido, doblamos por el centro de esta manera, y volvemos a dar unas puntadas para asegurarlo:

 

Para el centro del lazo vamos a utilizar otro trozo de yute. Yo elegí ponerlo en otro color, en crema, para que resaltase:

Doblamos el trozo hasta dejarlo a la anchura que nos guste:

Una vez hechos los dobleces, rodeamos el centro del lazo, que habíamos asegurado antes con algunas puntadas para que no se nos moviese. Cuando rodeemos, volveremos a dar unas puntadas a esta parte, ajustándola al lazo:

Y lo que sobre lo cortaremos:

Ahora, para terminar el lazo, cogemos otro trozo de yute, que doblaremos por la mitad, cortamos las puntas en forma de pico y cosemos a la parte trasera del lazo. Este será el resultado:

Repetimos toda la operación para obtener el segundo lazo.

Asa: Para el asa de la cesta necesitaremos, al menos, un metro y medio de yute (depende del tamaño de la misma).

• Empezaremos por un extremo, y coseremos el yute al asa. 

• Una vez asegurado, empezaremos a dar vueltas sobre el asa, para ir cubriéndola entera. Debe quedar bien tupida.

• Cuando lleguemos al final, volveremos a asegurar con puntadas, y recortaremos la parte sobrante.                                        

Para unir los lazos a las asas, puedes hacerlo de dos formas:

• Bien coserlos directamente a los extremos.
• O bien coserles por detrás un lazo finito, del que utilizaste para los saquitos de arroz, y anudarlos a los extremos. Esto fue lo que yo hice.

Y este el resultado de mi cesta:

Podéis utilizar los colores que queráis, añadirle pétalos de rosa, y todo cuanto se os ocurra.

Es muy fácil de hacer, ánimo!

Complementando a la novia

La elección de complementos de novia es casi tan importante como la elección del vestido o el ramo de flores: una mala combinación puede deslucir todo el conjunto.

Dicha elección dependerá del gusto de cada novia, del estilo que vaya con su personalidad, del corte del vestido, incluso de la estación del año. Nos encontramos, pues, con un gran abanico de posibilidades, todas diferentes e igualmente válidas, pero cierto es que debemos tener en cuenta ciertas pautas a seguir, que habrán que cumplirse independientemente de nuestros gustos.

Nunca debemos llevar...

La forma de vestir de las novias ha evolucionado bastante, y ya no distinguimos sólo entre estilo clásico y menos clásico.... Hoy en día, además de los tradicionales vestidos, podemos encontrarnos con novias que lleven un look de los años 40, novias princesas, flamencas o de corte andaluz, novias modernas y desenfadadas, piratas, o de estilo vintage, e incluso están las que deciden que el blanco no es su color.

Al igual que ocurre en la forma de vestir, en los últimos tiempos se permite casi todo en complementos: tocados en lugar de velos, guantes, o botas en lugar de los tradicionales zapatos, son sólo algunos ejemplos. 

Pero, si bien nos movemos en una amplia gama de lo permitido, también hay lugar para lo prohibido en cuanto a buen gusto se refiere. Hay complementos que nunca debemos llevar el día de nuestra boda, como:

Reloj: Olvídate de llevarlo si eres la novia, por muy maniática que seas del tiempo.

Joyas, collares o complementos grandes: Nada de querer colgarnos nuestras mejores piezas ese día; sea cual sea nuestro estilo, una novia SIEMPRE debe ir sencilla. El protagonista debe ser el vestido, y los complementos simplemente acompañan, pero no empañan, ni deben resaltar.

Gafas de sol y bolso: Por supuesto, están prohibidos ese día.

Están permitidos... Pero en su justa medida:

Anillo: Y con esto nos referimos al anillo de pedida, y siempre que sea discreto. La protagonista ese día será la alianza, y nada le debe hacer sombra. Por supuesto, cualquier otro anillo tiene vetada la asistencia.

Pulsera: Igualmente está permitido lucir una pulsera discreta, si va acorde con el resto de complementos. No estará permitido llevar más de una en el mismo brazo, y tampoco pulseras de colores o de material inapropiado.

Pendientes siempre:

Los pendientes son los imprescindibles de toda novia.

Al igual que el resto de complemetos, deben ir en consonancia con nuestro look, y tampoco deberían ser excesivos en su tamaño, aunque aquí hay más permisibilidad. Podemos lucir desde alguna joya antigua prestada, hasta bisutería moderna y especial para novias.

Respecto a la forma y material, los podemos encontrar más sobrios, modernos, redondos y aflamencados, de oro blanco, plata vieja, nácar, o con algún toque de color... Todo un mundo de posibilidades, y donde tener que elegir puede resultarnos incluso complicado.

¿Están permitidas las perlas?

Hay una leyenda que dice que "Las perlas de la novia significarán lágrimas en el matrimonio".

Las perlas son consideradas las lágrimas del mar, y por tanto, en algunos lugares, se tenía la creencia de que una novia no debía llevarlas nunca... 

Pero claro está, esto son sólo supersticiones y dichos populares. Por supuesto, las perlas están permitidas, siempre que, al igual que el resto de complementos, no sean exageradas. 

Además, para las más supersticiosas, en otras muchas culturas las perlas se consideran símbolo de buena suerte. Ya depende en lo que queráis creer.

¿Cuándo empezar a mirar complementos?

Una vez tengas el vestido, tienes luz verde para empezar a mirar y comprarlos tranquilamente. Pero nunca antes.

¿Qué complementos le vendrán bien a mi estilo?

Hay un estilo por cada novia, y diversos complementos para cada estilo. Resultaría imposible mostrarlos todos en una misma entrada, pero iremos abriendo distintos post que estudien cada uno de ellos.

De momento os dejo los complementos que llevé yo el día de mi boda:

Mi vestido era sencillo, de encaje y con cola no muy grande, de corte andaluz, y por tanto los complementos debían ir en consonancia. Tan solo llevé unos pendientes, un broche, peinecillos para el recogido y un abanico.

  
Pendientes

Eran sencillos, en forma de lágrima, simulaban plata vieja y llevaban dos brillos discretos. No pesaban, y pude llevarlos cómodamente todo el día. 

Broche

Cuando compré el vestido, llevaba debajo del pecho un pequeño lazo que ni me gustaba, ni le decía nada. Así que decidí quitarlo y colocarle un broche, busqué que fuese parecido a los pendientes, y el vestido cambió por completo.

 

Este fue el resultado.

Fotografía de mi amiga Gloria

Peinecillos

Un complemento típico del sur para el recogido son los peinecillos. Estos son los que yo lucí, junto con el velo. Los llevé colocados ambos en un mismo lateral.

Abanico

Y como complemento imprescindible, el abanico. Mi abanico era todo de encaje, a juego con el vestido, y no sólo sirvió de adorno: me casé en Sevilla en pleno Junio, a las 12h , así que más que complemento, fue una necesidad.

 

A petición de Alicia G. en los comentarios, aquí os dejo una foto de cómo quedaron colocados los peinecillos en el pelo:

Fotografía: Chema Soler

Primer borrador de la lista de invitados

¿Qué es un borrador de la lista de invitados?

Consiste en una primera lista que debéis hacer de las personas que queréis o esperáis que os acompañen en vuestro día. 

¿Cuándo debemos hacer esta primera lista?

Se debe confeccionar, si es posible, antes de visitar lugares de celebración o cáterings, porque dependiendo del número de personas que asistan al evento, así tendréis que elegir entre unos espacios u otros, sobre todo si lleváis un número más bien pequeño de invitados (hasta 70-80 personas aproximadamente), o por el contrario, un número grande (de 300-400 para arriba).  

Si lleváis un número "estándar" de invitados (es decir, entre 100 y 250 aproximadamente), tampoco es esencial que lo hagáis antes de empezar a buscar, aunque sí recomendable tenerla preparada antes de contratar, puesto que en la mayoría de los sitios os pueden poner límites una vez que vayamos a cerrar el trato.

¿Qué son los límites de invitados?

Los límites son condiciones que nos ponen las empresas relacionadas con la celebración para asegurarse de que el número de invitados que finalmente llevéis no será exageradamente diferente a lo que contratasteis en un primer momento.

Es decir, cuando firmamos el contrato, nos piden siempre un número aproximado de invitados, y a partir de dicha cifra pueden ponernos limitaciones en el caso de que llevemos muchos más o muchos menos de los acordados. Por supuesto, estos límites también se recogerán en el contrato que firmemos, o en caso contrario, no podrán exigirlos después.

Así, si creemos que aproximadamente podemos llevar, por ejemplo, 230 invitados, a partir de esa cifra pueden ponernos límite por arriba: "si finalmente superaseis los 300, pagaríais un pequeño suplemento por persona que sobrepase", o bien por abajo: "si esperáis unos 230, pero no superáis finalmente los 170, tendréis un sobrecoste por cada invitado que falte hasta llegar a esos 170". Estas cantidades, claro está, son sólo ejemplos para que nos entendamos. Los límites suelen ser amplios márgenes con respecto al número que personas con las que en un principio contamos.

Los límites por arriba suelen ponerlo en los lugares de celebración, por un sencillo motivo: vosotros estáis pagando por un espacio concreto, si faltan invitados, simplemente estarán más espaciados, pero si vuestra lista al final crece demasiado, tendrían que habilitaros otro espacio mayor, con la correspondiente subida de precio.

Así mismo, los límites por abajo lo suelen poner por el lado de cátering o cocina: si en principio, contratáis para 230, ellos esperan tener ciertos beneficios con vuestra boda, y conforme a eso, os harán el presupuesto, incluso a veces, hacen ofertas cuanto mayor sea el número de invitados. Si finalmente os presentáis con 120 personas, su beneficio se vería reducido considerablemente, y ya no sólo eso, sino que podrían incluso llegar a perder, puesto que tienen que hacer una inversión previa para atender vuestro enlace: comida, bebida, personal, equipos de desplazamiento, etc. Estos límites son, al fin y al cabo, una especie de seguro que cubriría la diferencia en caso de que ésta fuese exagerada.

¿Qué ocurre si mi lista definitiva varía con respecto a la inicial?

Lógicamente, desde que ponemos fecha de boda, hasta que confirmamos invitados, transcurren muchos meses, y en todo ese tiempo la lista sufre enormes variaciones, altas y bajas, y no siempre resulta como en un principio esperábamos. 

Por este motivo, estas empresas se aseguran poniendo límites, pero a su vez estos límites son bastante coherentes. Si creéis que llevaréis unos 230 invitados, ningún cátering os debe poner un límite de 220, porque se sabe que la lista suele variar en unas 40-50 personas aproximadamente, gente con la que contabais en un principio, y finalmente no asisten. Y a veces, parte de las bajas se compensan con nuevos invitados. Además el sobrecoste, por persona que esté por debajo del límite, es pequeño, y no deja de ser un seguro para ellos, más que un beneficio.

                                        
Por todo esto es importante que os sentéis a confeccionar el primer borrador de la lista de invitados a conciencia antes de cerrar ningún contrato, intentando ser ambos lo más realistas posible, y tirando más por lo bajo que por lo alto,  para aseguraros nunca llegar al límite que os pongan en el cátering.

Es decir, que si os salen unos 250 invitados en el primer recuento, podéis decir cuando os pidan una cifra que serán unos 230 aproximadamente, puesto que, si sube el número final, es indiferente para las limitaciones de cocina o cátering. Y tendría que subir mucho la lista para alcanzar los límites por arriba que os pueda poner el lugar de celebración. Esto casi nunca ocurre, las listas definitivas de invitados suelen siempre menguar con respecto al borrador inicial.

También es aconsejable que el número que le deis a las empresas sea más bien un intervalo:"llevaremos entre 200-230 invitados". Y nunca algo cerrado ni definitivo.

Así que os recomiendo paciencia el uno con el otro, y empecéis desde ya a imaginar quién asistirá a vuestro enlace...

Chema Soler: Nuestro fotógrafo

Conocimos a Chema Soler a través de su web, y su trabajo nos cautivó. A nueves meses de nuestra boda decidimos cerrar el capítulo fotógrafo, y avanzar un pasito más en nuestros preparativos. Buscamos a través de internet aquellos estilos y reportajes que fuesen con nuestra personalidad: fotos naturales y espontáneas, sin poses, pero a la vez artísticas y profesionales, nada dejado al azar, con escenarios estudiados, que recogiesen los momentos claves, pero también gestos como un guiño de ojos, un abrazo, o una lágrima. Gestos que, desde mi humilde opinión, considero más personales, cercanos y emotivos que los posados imposibles.

Yo, aficionada a la fotografía, sabía lo que buscaba, y tenía claro lo que quería. Entonces dimos con el trabajo de Chema, y, en ese momento, supe que tenía que hacer nuestro reportaje de boda.

Recuerdo que anotamos el teléfono y concertamos una cita. También recuerdo que anotamos un par de teléfonos más, a los que nunca llegué a llamar después de visitar su estudio y nos mostrase su trabajo: era justo lo que buscábamos, y ya no solo por supuesto el estilo de las fotos, sino también el acabado del reportaje, la elegancia de los álbumes, sin florituras ni ribetes, sin colores o letras extravagantes... y es que, cuando la fotografía es buena, no hay mejor adorno que ella misma.

Desde nuestra primera visita, Chema nos transmite la confianza y seguridad que andábamos buscando, y nos deja claro en el primer instante cómo es su forma de trabajar, qué tiempos debemos marcarnos para que todo salga en orden y nada se retrase demasiado, y qué tendríamos que hacer ese día: relajarnos y disfrutar de cada momento porque nuestra boda sólo ocurriría una vez en la vida. 



FOTOGRAFÍA:  CHEMA SOLER

 De esta forma, reservamos nuestra fecha, y volvimos a quedar pronto para visitar juntos el lugar donde nos recomendaba hacernos las fotos de exteriores, un lugar poco visto en Sevilla, pero a la vez muy céntrico y con infinidad de escenarios diferentes: el hotel Las Casas de la Judería. Otro gran acierto, sin lugar a dudas.

Así fuimos manteniendo el contacto, tanto con él como con Marta, su mujer y todo un encanto, a la que tuvimos oportunidad de conocer en Sevilla de Bodas, y que siempre ha estado atenta para resolvernos cualquier pequeña duda que pudiese surgir.

Y por fin llegó el gran día.... Chema llegó muy puntual, a la hora prevista. Eran las diez de la mañana y estaban terminando mi peinado. Tranquilamente subí a vestirme y cuando bajé vestida de novia, ya estaban las cámaras preparadas. 

La sesión de fotos en mi casa fue genial, quizás al principio andaba algo nerviosa (más que nada por el día en sí!), pero estaba en confianza, y pronto los nervios desaparecerían. 

FOTOGRAFÍA:  CHEMA SOLER

Al llegar a la Iglesia, donde irremediablemente las emociones estallan, ya perdí la cuenta de que Chema seguía allí, haciendo sus fotos, en ningún momento tenía que mirar o sonreir a cámara, ni andar al ritmo que me fuese marcando, simplemente tenía que ser yo, la novia, entrando del brazo de mi padre, con mi futuro marido al final del pasillo, y Chema, sin hacer ruido, era quien se adaptaba a nosotros. Durante la misa, igualmente, se tomaron momentos inolvidables.

FOTOGRAFÍA:  CHEMA SOLER

En exteriores, donde ya estábamos solos nosotros, los novios, con él, todo fue sobre ruedas. En el reportaje simplemente teníamos que ser nosotros mismos, íbamos hablando, de la mano, riéndonos, con el gesto de la cara totalmente relajado, contándonos cómo había sido la mañana de nervios, lo emotivo de la ceremonia, y Chema se encargó de captar cada instante: una caricia, una sonrisa, un beso... momentos preciosos y también divertidos.

A la llegada a la recepción de la Hacienda, y con el aluvión de invitados, de nuevo estuvimos inmersos en saludar a los familiares y amigos,  de nuevo en una nube donde se pierde la noción del tiempo, y de nuevo perdimos cuenta de que él seguía haciendo su trabajo, captando instantáneas imprescindibles para completar el puzzle de nuestro día.

La entrada al salón fue mágica, y también cada instante quedó inmortalizado.

                                  

Este jueves recogimos nuestro álbum de boda, tan sólo tres meses después, y no podríamos estar más satisfechos con el resultado. Simplemente espectacular. 

Y es que no es para menos: Chema Soler es un profesional de la fotografía con más de 20 años de experiencia en el mundo de la moda, publicidad, pasarelas, publicaciones en revistas sobradamente conocidas, y por supuesto, en reportajes sociales. Cierto es que podría haber empezado con este párrafo mi artículo, pero nosotros, además del gran profesional, hemos tenido la suerte de conocer a la persona, que nos hizo sentir que en nuestro día éramos lo más importante. Y así os lo queríamos transmitir.

Con este artículo queríamos agradecer y felicitar a Chema y Marta  por toda su labor, su trabajo y su simpatía.

www.chemasoler.com

Ferias nupciales Octubre 2.011

Aquí os traigo el calendario de ferias nupciales para el mes de Octubre 2.011.
  

"DE BODA"

Feria de Valladolid (Valladolid) 

8 y 9 de Octubre 

http://feriadeboda.com/portal/

"EXPOBODAS"

Bilbao Exhibition Centre B.E.C.,  Bilbao (Vizcaya)

Del 14 al 16 de Octubre 

 

www.expobodasbilbao.com/portal

"Bodas Guipuzkoa"

  

  Kursaal de Donostia (Guipuzkoa)

  15 y 16 de Octubre

                                                           www.bodasgipuzkoa.com

 

       

         "Fira Nuvis Sabadell"

   
         Centre de Fires i Congressos de Sabadell

       Del 21 al 23 de Octubre

          www.firanuvis.com

"Las Mil y una Bodas"

Recinto ferial IFEMA de Madrid (Madrid)

Del 21 al 23 de Octubre
  

www.ifema.es/web/ferias/bodas