Eligiendo cátering

Ya tenemos el lugar perfecto para celebrar nuestra boda y cumple todos los requisitos que queríamos: está bien situado, tiene unos jardines preciosos y la decoración perfecta... Pero no tiene cocina propia, así que ahora nos toca elegir cátering.

Es muy frecuente encontrarnos lugares donde se celebren eventos que no tengan este servicio, sino que alquilan el lugar e instalaciones. Y esto, aunque pueda parecer una desventaja, por experiencia os digo que no lo es. Simplemente tendremos que buscar un buen cátering que acompañe y esté en consonancia, y no necesariamente resulta más caro ambas cosas por separado. Nosotros comprobamos que no es así, y que incluso puede ser más ventajoso.

Nos queda claro que lo primero que debemos buscar es el lugar, y que nos decidamos por él, como ya vimos en otro post, por una serie de elementos que para nosotros sean puntos a su favor. Pero, si el lugar elegido no tiene cocina, no os preocupéis, y no lo descartéis simplemente porque no cumple ese requisito.

¿Qué debe tener un buen cátering para decidirnos por él?

En primer lugar, una clara relación calidad-precio: si nos decantamos por algo demasiado económico y de poca calidad, la boda será recordada por esto como punto fuerte. Y no queremos que ese sea nuestro caso. Si por el contrario, para tener calidad nos tuviésemos que decantar por algo exageradamente subido de precio, el presupuesto se nos dispararía. Y no solo no queremos que sea nuestro caso, sino que es algo inconcebible para la mayoría de nosotros, y más en los tiempos que corren.

Por eso, una buena relación calidad-precio, según mi punto de vista, la encontraremos cuando, o bien la calidad vaya acorde con el precio que estamos pagando, o bien esté por encima (esto sería lo ideal). Si la calidad supera al precio, estaremos en lo correcto. Pero esto es algo subjetivo. Cada uno de nosotros tendremos que valorar cuánto estamos dispuestos a pagar por la calidad que nos ofrecen, y si ésta está por encima o por debajo del precio que nos proponen.

La relación calidad-precio no debemos buscarla sólo en la comida. Un buen cátering ofrecerá además otros servicios que debemos tener en cuenta: plantilla de personal, Maître, instalaciones, medios, presentaciones, decoración, etc. Un cátering es un conjunto de elementos que deben complementarse para que el resultado sea un todo, y el precio debe reflejar también este punto. De nada nos sirve ofrecer una buena comida y pagar un precio por ella si el resto no funciona, si el entorno no es el adecuado, si no nos sirven de forma correcta, o sin alguien que marque los tiempos a los novios.

De hecho, una ventaja de contratar cátering por separado del lugar es que nos garantiza, en la mayoría de los casos, una mayor exigencia por parte de ambas empresas: no siempre en todos los lugares nos aceptarán cualquier cátering, y no siempre el cátering admite ofrecer sus servicios en cualquier lugar. La gente suele recordar una boda fundamentalmente por la comida y las instalaciones, y además tiende a relacionar ambas cosas como si fuesen una misma: "uy, aquí fue la boda de un vecino y comimos fatal"  (aunque el sitio fuese excepcional) o por el contrario "uy, allí fuimos a la boda de un amigo y comimos incomodos porque estábamos muy apretados y pasamos mucha calor" (aunque la comida estuviese perfecta).

Y esto es lo que tratan de evitar las empresas que ofrecen calidad en sus servicios: que la otra mitad no estropee lo que no depende de ellos. Por eso, muchas veces nos encontraremos que un lugar que no tiene cocina propia, sí tenga cáterings recomendados, o incluso exclusividad con alguno.Y este nivel de exigencia entre ambas es algo que favorece a los novios.

No debemos olvidar también, como punto fundamental, la relación calidad-cantidad, muchas veces relegada a un segundo plano.

¿Cuántas veces habéis asistido a un evento donde sabemos que trabajará uno de los cáterings con más nombre de la ciudad (la "marca" a veces hace mucho, elegimos por el nombre, y esto no siempre funciona), donde la calidad es superior... pero tan superior que casi no la catamos? 

 Es cierto que el objetivo de una boda no es "atiborrarse", pero tampoco debemos llegar al extremo contrario. Debemos ofrecer una buena comida de calidad, pero también variada, donde la cantidad no sea un problema, y donde tenga cabida cualquier invitado: desde el que come prácticamente de canapés, hasta el que repite tercer plato. 

Por ello, lo recomendable será que haya más variedad de platos, y con cantidades justas, ni mínimalistas, ni sobrecargadas: si ponen demasiada cantidad con un plato sobraría para el 70% de los asistentes, pero aquí nos fallaría la variedad.

También nos encontramos con el caso contrario: cáterings que ofrecen cantidad, pero donde la calidad falla. Al final para nuestros inivtados el resultado será el mismo que antes: comerán poco.

Otros puntos a tener en cuenta:

Como ya he comentado antes, un buen cátering debe cumplir una serie de requisitos, no sólo a nivel culinario, sino que debe contar con otros servicios, y cuanto más completos sean éstos, mejor calidad-precio nos estarán ofreciendo. Os doy algunas pautas sobre esto:

• Plantilla: Un buen personal, que tenga bien atendido a nuestros invitados, hará que nuestra boda marche sobre ruedas. Además el número debe ir en proporción a la cantidad de asistentes, y no quedarse corto.

• Maître: La figura del Maître es fundamental para marcar los tiempos de la boda, y sobre todo para orientar y tranquilizar a los novios, que ese día estamos en nuestra nube particular.

• Diseño y Decoración: Aquí incluimos desde las mantelerías y centros de mesa, hasta la decoración exterior, detalles de alfombras, maceteros, sombrillas, minutas, presentación de platos, vestimenta de la plantilla, etc. En definitiva, todo lo necesario para crear el ambiente adecuado.

• Otros servicios: Hay cáterings que ofrecen más servicios de los que estamos habituados a que nos incluyan en el precio, y todo es de valorar a la hora de contratarlo. Pero esto lo veremos en el siguiente y último apartado.

¿Cómo saber si nos sale más rentable contratar lugar con cocina propia o cátering por separado?

Fácil.

Cuando visitéis un lugar con cocina propia:

•  Anotad los precios por cubierto que os ofrecen, normalmente tienen entre 2 y 4 distintos a elegir. Mirad qué tipos de plato incluyen cada uno, y cuánta variedad.

• Tened en cuenta que en el precio os incluyen el alquiler de las instalaciones.

• Multiplicar el precio por el número aproximado de invitados que pensáis que llevaréis (hacer un borrador de la lista de invitados es fundamental a la hora de empezar a buscar; lógicamente la lista varía bastante según se vaya a acercando la fecha de la boda, pero necesitamos una aproximación, porque no es lo mismo 100 que 400)

• Ahora tendréis que sumar el precio aproximado de todo aquello que no os incluyen, como: cortador de jamón, venenciador, decoración, Dj, incluso las horas de barra libre... en definitiva, todo aquello que queráis que no falte en vuestro día y tengáis que contratar aparte.

 Cátering y lugar por separado:

• Si el lugar que os gusta no tiene cocina propia, simplemente tendréis que anotar el precio del alquiler de las instalaciones y buscar cátering aparte.

• Anotad el precio por cubierto que os dé cada cátering a los que hayáis pedido presupuesto, y tened en cuenta todo los servicios que os incluyen (normalmente ofrecen más que en lugares con cocina propia, como más horas de barra libre, venenciador, etc.), así como los que tendríais que contratar aparte.

• Multiplicad este precio por el número aproximado de invitados y sumad el alquiler del lugar y aquello que deberíais contratar aparte.

Una vez calculado el total en ambos casos, veréis qué os conviene más. Puede que si no hacéis esto, y os dejáis guiar sólo por el precio del menú, os llevéis después alguna sorpresa.

Nosotros para nuestra boda tuvimos la suerte de contar con un cátering magnífico, que cumplió todos estos requisitos con creces, incluso por encima de lo imaginado.

Abriré un post para contar mi experiencia con ellos al detalle, pero de momento os adelanto el nombre: Cátering Moyano Rodríguez.

Sin duda, de diez.